El Defensor del Pueblo Andaluz, José Chamizo de la Rubia, ha advertido del alarmante crecimiento de la ploblación reclusa en el marco de las II Jornadas de Voluntariado de Prisiones que, organizadas por la Delegación Diocesana de Pastoral Penintenciaria de Asidonia-Jerez, se celebraron esta pasada semana en el Hogar San Juan.
En su intervención, Chamizo alertó del "escandaloso crecimiento" de la población reclusa producido en España en los últimos años (unas 70.000 personas en la actualidad desde las 8.000 de 1975 o las 40.000 del año 2000) para poner el acento en la necesidad de estas alternativas. "Una fiebre popular, populista y justiciera existente en el magna de la sociedad actual" subyace en el fondo de una realidad sobrejudicializada fruto de la desestructuración social, "hasta en las relaciones vecinales".
La reforma del Código Penal que endurece penas o la referencia a casos susceptibles de alternativas a la prisión fueron puestos sobre la mesa en medio de una reflexión encaminada a proponer trabajos en beneficio de la comunidad, la localización permanente, los tratamientos particulares por buena conducta, los sistemas electrónicos para casos de régimen abierto, la evitación de la reclusión de los enfermos mentales o los módulos de respeto.
"El perfil de las cárceles va cambiando", señalo Chamizo, avisando de ello a los voluntarios participantes en las jornadas, más acostumbrados a personas vinculadas a la marginalidad, de la aparición cada vez más común de personas de clases medias. El Defensor del Pueblo Andaluz finalizó con una pregunta: "¿Qué hacer cuando se sale de la cárcel y nadie te espera?. Respondió congratulándose de la actividad de acogida de ciertas comunidades religiosas.
A pesar de todo, Chamizo instó a que los poderes públicos den respuesta a esta necesidad de acogida postpenitenciaria tan necesaria en la labor de reinserción. Para ello hizo votos, desde el convencimiento de que "las cárceles no pueden ser sólo centros de custodia y retención sino que tienen que llenarse de actividades educadoras y rehabilitadoras".
Del mismo modo, el Defensor del Pueblo Andaluz insistió en el importante papel que desempeñan en esta tarea la existencia de grupos movidos desde el compromiso de su fe cristiana.
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